Ferias del Empleo

Hoy hice una colección de más de 100 volantes, volantes de todos los colores, llenos de errores, mal cortados, pero obtuve ofertas que ofrecían una patada por el orto, porque la mayoría era, como decirlo, muy extraña la combinación de requisitos y pues uno no puede presentarse diciéndole al reclutador que solo cubre la edad y sexo, eso en definitiva sería algo muy gracioso.

Esas filas que se hacen a la entrada, que son inmensas y que a mi punto de vista, si las personas no se inscribieron en la página para tener acceso, a mi parecer y como respeto a todos aquellos que siguieron las indicaciones, no se les debió dar acceso, sé que todos necesitamos trabajo, pero aquellos que no siguen instrucciones, que llegan a último minuto y que todavía se molesta por que tardan en pasarlo y para colmo consigue trabajo, eso es mierda señores, porque a veces uno sigue todo el maldito proceso y no falta el flojo que lo obtiene.

El evento decía de 9 de la mañana a 3 de la tarde y la entrada fue alrededor de las 11, la organización un asco y un reducido espacio con mesas mal ubicadas, con carriles o pasillos demasiados estrecho y uno que otro que se paraba justo en medio sin prestar atención a nada pero como estorbaba, algunos hasta de traje iban, pero sus expectativas eran altas y abandonaban el evento con decepción, la mayoría de las plazas ni siquiera eran en el centro del municipio ye so ya dejaba mucho que desear.

Preguntas y preguntas, vacantes tan difíciles de llenar para la mayoría, se llamaba Feria del empleo para jóvenes, pero abierta a todo el público, no dejo de imaginar aquellos padres que acompañaron a sus hijos, no con la intensión de obligarlos a conseguir trabajo, sino con la simple necesidad de que se sintieran apoyados y cuando preguntaban sobre la experiencia ya que se encontraba buscando su primer trabajo, respondían tajantemente que era indispensablemente necesaria y a mi amigo solo le respondí entre broma:

“Feria del empleo para jóvenes, puede entrar pero no llenara ninguna vacante”.

Y luego dicen los mayores que los jóvenes somos irresponsables, cuando la verdad es que no están las puertas abiertas para nosotros.

¿Feria del Empleo o Feria de las Desilusiones?

Srta. Desempleada.

Vendedora de piso,

Uno consigue o mejor dicho toma cualquier oportunidad para tener trabajo, vi la oferta y se me hizo fácil presentarme, no sin antes preguntar si era necesaria la experiencia en ventas y me dijeron que no, JÁMAS LES CREAN, porque así como se empeñan en decir que lo único que necesitan son ganas de trabajar para postularte, solo hacen que uno termine humillada, pisoteada y te den un “gracias, hasta allí”.

Éramos 3, pensé que sería una entrevista normal, pero después  de ver tantos ojos o mejor dicho de ver a todos los que son en cierta parte dueños de la tienda, que aunque su táctica de atacar fue muy buena y que tienen a su vendedor estrella, que he de reconocer que hasta yo le compraría si tuviera dinero, fue una entrevista que no solo intimida, por dios si quieren ponerme a prueba que sea de verdad y no así.

Sé que se trata de vender y no busco pretexto pero su manera de exigir que le vendiera algo que en primera desconocía, en segunda no tenía nada natural el ambiente y las personas que me juzgaron estaban más interesadas en saber que socio había hecho tal cosa me hizo saber que estaba rechazada.

No sabía vender, lo acepto y sé que la vida es cruel, que hay todo tipo de personas y sé que lo que desean es que sus productos se vendan, pero por un momento, si tan solo por un momento se pusieran a pensar en que exigen a diestra y siniestra, juzgan y solo ofrecen un turno de 9 horas con un sueldo que deja que desear y que de comisión no dan más que las gracias y más que ello destrozan un poco la confianza de las personas que se ofrecieron como yo, se pusieran en el lugar propio y que alguien desconocido los estresara a tal punto que desearan no haberse postulado.

El otro chico rechazado se ve que se fue peor que yo, pensó que no había visto sus lágrimas, pero la verdad si yo no llore e incluso agradecí, fue por que al menos y por lo visto yo tengo más educación, después de votar así, tan a la ligera y de saber que yo no obtuve ningún voto, permanecí de pie, pero la verdad es que quería huir desde un principio.

Rechazados e ignorados, todavía ofrecieron que nos tomarían en cuenta, nos pidieron nuestros datos y me agrada decir que les mentí, cambie un número, cambie la dirección y espero no topármelos de nuevo, no es que sea rencorosa pero personas como ustedes, que crean y venden, deberían seguir siendo los únicos que hablen de sus productos, anotaron mi nombre y esa hoja ira seguramente al bote de la basura.

Del 1 al 3, a mí me dieron un tremendo 0, pero está bien, debo decir que me fue mejor de lo esperado.

Vacantes de vendedora - Descartada.

Srta. Desempleada.

¿Imagen?

Esas personas que te dicen que la imagen habla sobre tu persona, que da a denotar que tan preparado estas, quiero decirles que se jodan.

Cuando uno trabaja no usa su vestimenta, usa las extremidades de su cuerpo, su cerebro y sus conocimientos, si desean tanto agradar la vista por que no dan de uniformes trajes, cursos sobre los peinados que se deben usar, cantidad de maquillaje y sobre todo porque no dejan de discriminar.

Srta. Desempleada.

Como superar un rechazo laboral.

Uno debe tirarse en la cama, quitarse esos incomodos zapatos y no hacer nada, que la cabeza nos de vueltas con las ideas descabelladas y que la última esperanza de que nos llamaran y dirán que ha sido un error desaparezca, "aceptación", no hemos sido elegidos y aunque sé que te deja en estado traumático hay que superarlo para las nuevas entrevistas que representan un camino incierto.

Un baño frio, una tarde escuchando radio o tu música favorita no te vendrá mal, a veces es bueno dedicarse un tiempo para recuperar un poco nuestra confianza y poner puntos sobre lo que podría estar fallando, quizás deberías considerar esto unas muy buenas vacaciones, sé que te preocupan tus deudas, tus gastos personales y el que no puedas darte un capricho, pero no todas las empresas te van a cerrar las puertas, estarás un poco apretado de efectivo pero solo será un tiempo.

Se dice que el que busca encuentra, así que hoy solo busca el reconciliarte contigo, uno empieza a tener charlas propias que hasta cierto punto se vuelven hirientes, has lo que más te gusta, come tarde, ve una película en tu casa o disfruta de un buen libro, al final de cuentas tienes copias y solicitudes a montones.

Todo lo bueno tarda en llegar, no te preocupes, hoy has sido rechazado, mañana te ira mejor.

Srta. Desempleada.

P.D. Mis mejores deseos en esta búsqueda. 

Entrevista de trabajo.

Antes de la cita previa:

*Se me ha hecho tarde.

*Mi atuendo elegido ahora parece no apropiado.

*Odio cargar tantos papeles.

*El transporte de pronto se ha vuelto demasiado lento.

*El tráfico parece que se ha duplicado.

*Las personas y el calor parecen conspirar en mi contra.

*Mi cabello se ha esponjado.

*Mi rostro ahora está más brillante, maldito sudor.

*Mi maquillaje se ha corrido.

*El reloj me muestra que tengo aun 5 minutos.

En la recepción:

*Buenos días, aparezco toda agitada.

*Aparece mi tartamudez.

*Mi aspecto deja mucho que desear.

*2 minutos después de comunicar mi presencia me mandan a esperar.

*Ni siquiera me siento cómoda esperando.

*Alguien me dice como me debo sentar.

*Odio estos zapatos.

*Debo estar tranquila.

*Amabilidad y confianza sobretodo.

*Debí cancelar.

*Ya estoy rechazada.

*Mátenme.

Parece que mi turno ha llegado.

-“Señorita Desempleada…señorita Desempleada”.

-¿Me llamaba?

-Sí, el Licenciado Sin Piedad la está esperando.

-Gracias.

Me levanto y camino hacia la puerta, me recuerdo que debo tocar, ser como un perrito que sabe recibir órdenes y me auto indico lo que me enseñaron; “no des la mano, no te sientes hasta que no te lo indiquen, no hables de mas, no tengas tanta confianza pero que no pase a ser desconfianza y por el amor de dios no la vayas a regar.

-Adelante.

-Buenas tardes-, me coloco en el interior de la oficina y cierro con delicadeza la puerta.

-Buenas tardes, por favor tome asiento-, me indica donde debo colocar el trasero-. Usted debe ser la Señorita Desempleada…

Asiento con la cabeza, creo que la he regado, me pone a prueba, pregunta por lo que he escrito, por mi experiencia, sé que está leyendo mis movimientos corporales, sé que me está descartando, sé que aunque le diga que soy una buena inversión solo buscan saber cómo fue que deje mi antiguo empleo y estoy descartada.

-Bueno, déjeme decirle que esto sería todo de su parte ahora solo debemos esperar a que den el visto bueno, después le notificaremos si ha sido aceptada, nosotros le llamamos…

¡ESTO EN DEFINITIVA ES UNA MIERDA!

Srta. Desempleada.

Llamada Entrante

((Ringtone de James Bay por unos segundos))

- Bueno.

- ¿Bueno?

- Buenas tardes, deseo hablar con la señorita desempleada.

- Ella habla…

¡Uff!...

Ese estrés postraumático después de una falla clara de parte mía, pero más de la señorita que llamo, estaba distraída y no pude cerciorarme de conseguir una cita, otra oferta o mejor dicho, otra oportunidad se me ha ido.

¿Por qué es tan difícil?, me deshago de mi trauma a ese tipo de llamadas que no dejan venderme, escribiendo, comprándome una chuchería, aunque sin duda, deberían mejor mandarme un mensaje con fecha, hora y ubicación, pero no se puede, así no funciona y si fuera por mí, evitaba a toda costa el tener que salir de mis cuatro paredes y no por ser floja, es que ya no genero la misma confianza, mi ropa esta pasada de moda y mi “buena imagen” me queda cada vez más…mm, como decirles, mas extravagante.

Sin dinero y con cuentas por pagarse, he descuidado esta imagen que debería ser mi carta de presentación y que ahora solo es mi cara de frustración, al menos no he dejado de reírme y sobre todo, no he dejado de buscar trabajo.

Entre tanta solicitud, uno empieza a mejorar su memoria, ese CURP que ahora podría escribir sin la necesidad de mirarlo, al igual que el Afore o NSS, pero parece que solo sirven por ahora para ser escritos, comienzo a detestar mi nombre, mi edad, mi peso, mi estatura, donde vivo, mi historial académico, mis antiguos trabajos, pero sobretodo la poca oportunidad laboral.

Srta. Desempleada.

:

Buenas tardes, noches, días o hermosa madrugada, me permito remitir desde la soledad de mi cuarto. 

Que bien es poder saber que escribir, porque a veces uno necesita un poco desahogar sus penas laborales, sus llantos internos de tantas vacantes que ofrecen todo y a la vez nada, a esos de recursos inhumanos , porque eso parecen, quisiera decirles que han dejado una gran oportunidad irse, pero es que sino confió en mis conocimientos, hace mucho hubiera tomado el camino fácil, vender por catálogo y no es que sea un trabajo malo, al contrario, es sumamente difícil, no cualquiera resiste vender marcas conocidas a gente desconocida que a primeros pedidos paga, pero cuando se vuelven de "confianza" a como dan largas.

Ejem...disculpen, me desvié del tema, pero es que uno necesita sacar todo y por eso les hablare sobre mi decepción laboral, a mis ancianos años, y eso que tengo veintitantos, digo ancianos porque para las empresas estoy envejeciendo y entre más cumplo años, es más deprimente saber que mis oportunidades laborales se reducen o los contratos tienen fecha determinada.

Parecería que cuando uno busca trabajo, empieza una rara colección de volantes, anuncios y sobre todas un recurrente "nosotros le llamamos" y estamos ahí con la esperanza hecha añicos porque muy rara vez hablan y luego todavía se preguntan por qué no llenan las vacantes si los requisitos son muy claros y nada difíciles, pero sí que es difícil convencerlos, además de que mis queridos reclutadores, su publicidad es mala, carece de información completa y los volantes presentan más errores que mi falta de experiencia, no se diga de esos que tienen con lapicero el numero para llamar o la dirección borrada con un marcador de aceite y todavía quieren que uno considere su oferta seria.

¡Oportunidades!... ¡Carajo!... 

Necesitamos oportunidades laborales, lo que usted solicita, solo usted puede enseñárnoslos, denos un jodido curso a todos aquellos que se levantan temprano y sobretodo se bañan para ir a sus reclutamientos masivos y todavía se quedan cuando dice el salario, si hemos llegado hasta allí es más que claro que no nos interesa su oferta, nos interesa trabajar y hemos hecho un gran esfuerzo por ir.

He asistido a un sin fin de entrevistas, he recibido un par de ojos que miran de arriba hacia abajo y que me botan por cómo voy vestida o peor por no ser bonita, ni siquiera me dan la oportunidad de recalcarles mis papeles o mi experiencia en su cara, porque no me dejan ni presentarme, con un simple "que desea”, “venga tal día" o "no contamos con ofertas activas", aun cuando tienen gente escribiendo en sus solicitudes, dan decepción, pero bueno están a cargo de una zona, son los que ofrecen.

Y tienen razón en un punto, la primera impresión es lo que cuenta y si ustedes tratan así, no se pregunten por que la escases de las vacantes, hay mucho despechado por allí que ustedes rechazaron y le hacen mala publicidad, están mal, lo sé, pero deberían cambiar sus tácticas, no todo es lo que el perfil pide, es que la persona no solo llene el perfil y haga de su trabajo una rutina, es la necesidad de amar lo que uno hace.

Recuerden que las solicitudes, copias, impresiones, internet, llamadas, mensajes, tienen un precio y uno tiene que regalárselas, para que la mayoría terminen en un bote, al menos deberían regresarlas, habrá alguien que si las necesita y ese es uno mismo, entre tanta copia que piden se van aproximadamente lo que hoy cuesta un dólar, no todos los que buscamos trabajo tenemos ese recurso llamado dinero y aun así, tomamos en cuenta el hecho de que nos citen.

Uno va en el transporte imaginándose que ya trabaja con ustedes, que porta ese uniforme, hasta casi sale un "en que puedo ayudarle estimado cliente", para que nos den una patada por....

Por no tener lo que usted necesita, pero bueno, uno siempre tiene la culpa, espero que algún día no sea yo la que le maneje "inbox", que me llame y lo deje colgado con el recurrente "el número que usted marco se encuentra ocupado, favor de llamar más tarde", que usted tenga que pedirme mis informes...

Srta. Desempleada.

Un cordial saludo a todos esos compañeros de barco, desempleados como yo y con deudas en los bancos. 

Bienvenidos a esto que me hace querer sacarle lo gracioso de buscar empleo en México y sobretodo, Cualquier parecido con la realidad es porque realmente me paso.